En las antiguas Provincia de Padilla y Provincia del Valle de Upar, que sociológicamente constituyen lo que se ha dado en llamar el país vallenato y que hoy por razones de división política una parte está integrada al departamento de La Guajira y la otra al departamento del Cesar, en ese país, digo, las parrandas han sido una importante cuota de su idiosincrasia o identidad.
Armando León Quintero era un codacense compositor de canciones vallenatas, folclorista y sobre todo parrandero de nacimiento. Habitual contertulio de parrandas acompañadas con conjuntos de acordeón o con guitarras que igual se celebraban en cualquier pueblo de la región desde Codazzi hasta la mismisima Riohacha.
En esas bohemias correrías, compartió tragos, versos, anecdotas, narraciones, chistes, canciones y fue amigo de muchos guitarristas. Conoció y degustó la guitarra, por ejemplo, de Jesús Torres virtuoso guitarrista de Fonseca, de Carlos Huertas en Barrancas, de Julio Vásquez, El Beje Bolaño, Ramón Martínez, etc. pero siempre pensó que en Codazzi había uno mejor que todos: el Pole Alarcón; y por eso en más de una ocasión se hizo acompañar de él en encuentros parranderos en pueblos de la Guajira, especialmente.
Corrían los años ochenta y ya existían festivales vallenatos que permitian a los acordeoneros enfrentarse para demostrar quién era el mejor, en franca lid. Pero no había un evento que le permitiera a los guitarristas lo mismo; por eso en una de sus acostumbradas parrandas en Codazzi, su pueblo, le solto a sus companeros de juerga la laed de realizar en Codazzi un festival de música vallenata interpretada en guitarra. En el fondo, quizás para ver al Pole batirse con todos.
Festival
Ocurrió una noche de Julio de 1987.
Codazzi parecía ser el lugar escogido por los dioses para estas contiendas puesto que ya se distinguía aquí el gusto por la guitarra. Laudelino Fernández, Lucho Alarcón, Sebastián Valbuena, Basilio Zedán, Hugues Alarcón, Hector Sierra, Rafael
Moya, Adolfo Bolaños y otros ejecutantes de la guitarra daban fe de ello.
De aquella parranda Armando León salió muy animado por la acogida que su idea tuvo entre sus amigos y fue, dia después, a presentarla a Aprocoda (Asociación de Profesionales de Codazzi), entidad que organizaba desde unos tres años antes el anual Encuentro Regional de la Cultura, un grandioso certamen del que los codacenses se sienten orgullosos. Pero allí su propuesta no tuvo acogida.
Decidido a no dejar morir su idea redirigió sus pasos. 50 pasos le bastaron. El alcalde municipal de la época Dr. Eloy Quintero Martínez la recibió con entusiasmo.
Tal sería su entusiasmo que inmediatamente se puso a trabajar en ella con el propósito de realizar el festival en la misma fecha de las fiestas patronales de la población: 15 de Agosto. Es decir, un mes después, contra todo pronóstico se logró.
El festival vio la luz del 14 al 16 de agosto de 1987.